Hoy más temprano fui a un centro de cobranzas a sacar dinero.
No me preguntes porqué, pero no me dejaron hacer el retiro.
“Demasiados movimientos” me dijeron…
No sabía que había “un límite de movimientos” para poder retirar MI dinero.
En fin, incomprensible.
Cuestión que mientras estaba haciendo la cola habían dos personas poniéndose al día sobre sus respectivas vidas.
Al parecer el marido de una está trabajando desde su casa. Teletrabajando por la pandemia.
Y le contaba que la convivencia se estaba volviendo un poco “pesada”.
Pese a que “estaba en la casa” colaboraba poco con los que haceres.
Eso estaba angustiando y estresando a la mujer que con poca discreción le contaba sus penas a su amiga.
Esta mujer tenía unos lentes de sol que se acomodaba a cada instante, de esos grandes cuadrados.
Frases como “Está todo el día frente a la computadora, ni que trabajara cargando bolsas de arena” eran recurrentes.
Y así mientas su amiga le asentía.
Pues bien después de pagar mis cuentas y que NO me dieran mi dinero me fuí.
No es que tuviera un particular interés por conocer mas indiscreciones de la mujer de lentes cuadrados.
Sabía que era una charla de desahogo.
Estaba liberando su estrés… no de la mejor forma pero algo es algo.
El estrés cuando no es tratado puede repercutir en dolencias y enfermedades.
O puede llevar a tomar decisiones que no son las mejores. La mujer de los lentes de sol, por ejemplo, podría decidir separarse.
Por eso es importante tratar el estrés y la ansiedad de manera adecuada.
Hablando de tratar de manera adecuada…
Quiero mencionarte que en estos momentos tengo 4 plazas de terapia disponible.
Tengo lista de espera. Es decir, ya tengo gente interesada en ocuparlas.
Pero siempre doy prioridad a las personas de esta lista. Por eso te lo estoy comentando.
Si deseas realizar terapia conmigo:
Es solo por unas horas pues luego, de quedar plazas disponibles, se las adjudicaré a la lista de espera.
Un saludo.
Lili