Mi hermana, mi amiga estilista y una mala decisión.

La madre de una amiga es estilista aunque ya no trabaja más, está jubilada.

Es muy buena persona, a mi siempre me ayuda con mi pelo.

Resulta que se la recomendé a mi hermana.

Quería fuera para que disfrute de una buena estilista.

Porque es tu pelo ¿sabes? Tienes que dejarlo en buenas manos.

Cuestión que la llamó y arreglaron.

Al minuto mi hermana me llama para decirme que no le quería cobrar.

Pues es lógico, Margarita ya está jubilada y no quiere cobrar.

Nada, que quería pagar y no sabía como hacer.

Me metió a mi en el medio para que hablara con Margarita.

Por si no lo sabes en Psicología Social se estudian los mecanismos de influencia.

Hay uno que se conoce como reciprocidad.

Este mecanismo nos hace sentir en deuda con los demás. Por eso mi hermana quería pagar, para no sentirse en deuda.

Vuelvo a la anécdota.

Mi hermana quería que yo interviniera.

Obviamente no lo hice, es un tema de ella.

Ella me dijo que quería cortarse el pelo y yo las contacté.

No es por mala, pero esta es una de esas situaciones donde por hacer un favor…

una termina quedando mal parada.

Supongo entiendes a lo que me refiero.

Mira si será fuerte nuestra mente y como nos puede jugar en contra.

Mi hermana decidió cancelar la cita.

Prefirió ir con su última estilista con la que no estaba conforme antes de sentirse en deuda con alguien que ni siquiera conoce.

El mecanismo de reciprocidad le ganó.

No pudo gestionar esa sensación de incomodidad, de deuda.

Prefirió dejar su imagen, en manos de alguien en quien desconfía y con la que está disconforme.

Y mi hermana trata con personas en su trabajo. Su imagen es importante.

Yo por mi parte contenta de no haber intervenido porque a Margarita no le agradó que mi hermana no aceptara su invitación.

¿Porqué te cuento todo esto?

Porque hay una pequeña lección que podemos rescatar de esta anécdota.

Nuestras emociones muchas veces nos juegan en contra sin darnos cuenta.

A veces lo hacen cuando tomamos pequeñas decisiones… y otras cuando tomamos decisiones que son importantes para nuestra vida o nuestro futuro.

Es importante aprender a gestionarlas para que no nos saboteen.

Por eso te recomiendo DESCODIFICAR TU MUNDO INTERIOR y aprender a hacerlo.

Así puedes adueñarte de tus decisiones y llevar tu vida, tu futuro y tu cabello a donde desees.

Lili

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